Si en tu viaje a Asia estás buscando tranquilidad, recogimiento y serenidad, seguramente Vientiane es un destino que te llamará mucho la atención. Situada en una amplia curva del río Mekong, alberga algunos de los monumentos más grandiosos, apreciados y destacados de Laos. Además de experimentar cómo la ciudad – al igual que el resto del país – se va desperezando y desarrollándose con la ayuda del comercio exterior y la influencia del turismo, hay una serie de rincones y puntos interesantes que te recomendamos que visites, si viajas a Laos y te acercas a Vientiane.
El templo más antiguo de Vientiane – data del año 1818 – y uno de los más llamativos es Wat Sisaket, único centro de culto que quedó en pie tras el conflicto armado con Siam. Lo más destacado son sus paredes interiores y las casi siete mil – has leído bien – estatuas de Buda que contiene.
Además de este ejemplo palpable de la historia del país, puedes profundizar más en las vicisitudes de Laos en su Museo Nacional. Diferentes exposiciones, cuadros y fotografías relatan la historia reciente del país y sus sucesivos conflictos y crisis. No solo en la guerra de Siam, sino también en su confrontación con japoneses y estadounidenses.
No puedes visitar Vientiane y no ver That Luang. Se trata del edificio religioso más importante de Laos y su símbolo nacional. El edificio actual es una reconstrucción de 1930. El original fue construido en el S. XVI, aunque fue destruido en la guerra de Siam. Su enorme estupa en forma piramidal cubierta de oro está rodeada por treinta estupas de menor tamaño. Su construcción en tres niveles diferenciados pretende representar el proceso de ascenso desde la tierra al cielo. También es imperdible el templo de Haw Pha Kaeo, construido en el S. XVI para acoger el famoso buda esmeralda – actualmente en Tailandia –. Recomendamos, sobre todo, visitar los coloridos jardines que rodean el templo.
Una de las atracciones más particulares de Laos se encuentra a las afueras de Vientiane: Buddha Park – o Xieng Khuan por su nombre oficial –. Se trata de un parque con más de doscientas esculturas de buda.
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