Guangzhou, también conocida como Cantón, es la capital de la provincia de Guangdong, la cuna del chino cantonés y la gastronomía cantonesa (una de las menos picantes del país) y una de las ciudades más ricas y prósperas del país. Además es una urbe llena de contrastes… es de esas ciudades chinas en las que pasas de estar en medio de una jungla de cristal, como la plaza de Tianhe, o ZhuJiang New Town, a estar en la china tradicional con solo cambiar de calle.
En esta ciudad no encontraremos enormes templos ni suntuosos palacios, nunca fue capital del país ni residencia de emperadores, pero encontraremos pequeños rincones que nos revelarán la importancia histórica que siempre ha tenido esta ciudad. Me gustaría empezar hablando del templo de los seis banianos (imagen superior), al que el poeta chino Su Shi dedicó sus versos.
Otro símbolo del ciudad, es la residencia del Clan Chen, fundada hace más de 120 años para proporcionar alojamiento y un sitio de estudio a los descendientes del clan que se fueran a presentar a los prestigiosos exámenes que, en aquellos días, solo se podían tomar en la Guangzhou. La imagen superior corresponde a uno de los muchos coloridos murales que encontraremos. Tampoco os podéis perder de la ciudad, es el Sun Yat-sen Memorial Hall (imagen inferior) dedicado al “padre de la república de China” (antes de que Mao Ze Dong instaurara la república popular), ya que su lugar de nacimiento pertenecía antes a esta provincia:
No obstante, sin duda alguna, lo mejor de esta ciudad está en pasear por su calles, descubrir sus mercados, disfrutar de su comida y de su gente. Relajarse al atardecer junto al río de las perlas o tomar algo en los múltiples puestos callejeros (teniendo cuidadito de lo que se come), puede ser la guinda que corone la visita a esta ciudad del sur de China.
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