La ciudad de Kandy, en Sri Lanka es probablemente la única – además de Colombo – que pueda y deba recibir ese calificativo con todas las de la ley. Se trata de un emplazamiento urbano bullicioso y lleno de oportunidades de descubrimiento, entretenimiento, cultura y gastronomía. Rodeada por colinas boscosas de increíble belleza y densidad tropical, tiene muchos puntos que pueden seducir a los turistas.
El más conocido es el Kandy Esala Perahera, que se celebra entre julio y agosto. Se trata de un festival de carácter religioso y ritual donde se engalanan elefantes y se ensalza la figura de Buda, a través de bailes en las calles decoradas de la ciudad. Se celebra entre los meses de julio y agosto y, si viajas a Kandy por esas fechas, podrás ser testigo de danzas de fuego y otros muchos festejos pintorescos y exóticos.
Con el paso de los años ha ido adquiriendo importancia y proyección internacional, siendo conocida más allá de las fronteras de Kandy y transformándose en un símbolo, tanto de la ciudad como de toda Sri Lanka.
Uno de los principales atractivos de Kandy es su lago – creado artificialmente en 1807 por Sri Vikrama Rajasinha, el último gobernador del reino de Kandy. –. Dar un paseo por sus orillas para culminar en las inmediaciones del Templo del Diente Sagrado es una buena idea. Este templo también es una de las atracciones no solo turísticas, sino también espirituales más importantes de la ciudad.
Recibe este nombre porque en su interior se custodia un diente que hipotéticamente perteneció a Buda. Aunque la reliquia propiamente no se muestra al público, la sala que la alberga sí está accesible, durante las ceremonias de ofrenda y oración. Podrás ver la estupa donde está colocado el cofre que guarda el preciado objeto, aunque para ello debe hacerse cola, dada la gran afluencia de creyentes y turistas. Por el mismo motivo, la estupa es visible durante apenas unos segundos.
Existen otros templos budistas que también tienen importancia en Kandy. Malwatte y Asgiriya son, de hecho, los más importantes de Sri Lanka. Ambos ejercen como las respectivas sedes de las principales Nikayas – que es el nombre que reciben las órdenes de monjes –. El Maha Vihara Malwatte está al otro lado del lago, mientras que el Asgiriya Maha Vihara está en la zona noroeste del centro de la ciudad.