Uno de los lugares que no puedes dejar de visitar en un viaje a Myanmar y que conserva su esencia más pura, son las cuevas de Powintaung. Esto se debe a que la mayoría de los viajeros aún no se acercan a este impresionante lugar, bien por desconocimiento del mismo o bien por la dificultad de su acceso.
Acceso a las cuevas de Powintaung
No lejos de Amarapura, desde la población de Monywa, se toma un ferry para visitar estas fascinantes cuevas. El lugar esconde un tesoro en forma de 400.000 estatuas de buda de los siglos XVI al XVIII.
Que ver en las cuevas de Powintaung
Las cuevas son todo un espectáculo debido a su diversidad, así como por la disposición de las estatuas de los budas. Igualmente, en sus paredes encontramos una rica variedad de pinturas de la mismo época, muchas de ellas en perfecto estado de conservación.
Según la leyenda, este complejo de cuevas era la morada de un “Zawgyi”, un tipo de alquimista que poseía poderes sobrenaturales. Se llamaba U Po Win, de ahí el nombre de la cueva. Según la tradición popular de Myanmar, los Zawgyis son todopoderosos y pueden volar, bucear bajo el agua, son capaces de llegar a cualquier lugar en un instante, pueden curar enfermedades y dolencias y convertir los metales en oro, aliviar a personas de todo tipo de enfermedades y desastres, etc. Lo cual hace aún más interesante la visita a este complejo de cuevas que poseen un aire místico de lo más misterioso.
Muy cerca, de regreso a Mandalay, es buena idea parar en el Templo de Thanbode, que también alberga en su interior más de 500.000 estatuas de buda.