Situada en una meseta a mil metros del mar, el aire fresco de la zona atrajo rápidamente a los británicos en la época colonial. La ciudad de Pachmari, India, es famosa por su limpieza, su verdor y su tranquilidad. No es quizás la estación de montaña más célebre de India, pero si es interesante el viaje hasta allí es debido a su ambiente e influencia colonial. Sus iglesias victorianas, su arquitectura europea se mezcla exóticamente con una vegetación de árboles tropicales.
Aún se conserva ese encanto del Imperio Británico en el campamento de entrenamiento militar, aunque construido después de la independencia de la India. Una atmósfera del pasado aún sigue respirándose en la ciudad con sus desfiles de bandas militares y sus oficiales del ejército retirados con sus bigotes en los clubs de caballeros al a vieja usanza. La mejor época para visitar Pachmari es sin duda entre los meses de septiembre y mayo.
Una excursión a Chauragarh, la montaña con el espectacular paisaje natural que la rodea, el Satpura National Park al oeste de la ciudad. En él se pueden contemplar la vida salvaje en su apogeo. La ciudad es un punto de turismo para muchos indúes de las ciudades de alrededor, especialmente parejas de novios y recién casados.
También suele ser visitada por multitud de peregrinos que son traidores a los ocultos santuarios de las gargantas y los picos de alrededores. Por todo ello y por ser una ciudad a la que aún no ha llegado el turismo masivo, bien merece la pena viajar hasta esta zona de la India en la que se puede respirar el auténtico aroma de la época colonial y de los valores tradicionales.
