Colombo, Sri Lanka. Un mosaico de colores y culturas

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La capital de Sri Lanka, Colombo, es la mayor ciudad del país y su mayor y más importante puerto. Esta condición portuaria la convierte en un enclave histórico de paso, debido al flujo comercial y le da un «sabor» especial. En pocos lugares como en Colombo encontramos una mezcla tan variopinta, equilibrada e interesante de culturas de las islas circundantes.

Esta curiosa mixtura se traslada también en infinidad de detalles de la propia Colombo: mercados plagados de productos exóticos y heterogéneos, jardines, edificios impresionantes de diversos estilos, barrios llenos de carácter y unas playas dignas de postal. En muchos rincones de Colombo se puede apreciar el marcado sabor colonial y el ambiente de relativa «elegante decadencia», que contrasta con la modernidad de zonas como Galle Road, que hace las veces de arteria principal de la ciudad. Colombo es el centro político, económico y cultural del país y dispone de muchos atractivos, si te decides a visitarlo con Destinos Asiáticos.

¿Qué hacer en Colombo?


Uno de los centros que quizás debas visitar de manera imprescindible es el National Museum. Presidido por una estatua impresionante de Buda que data del siglo XIX, en este museo podrás admirar distintas muestras y exposiciones de artesanía, armas, esculturas, pinturas y una colección bastante respetable de máscaras de demonios de bastante antigüedad. Uno de los hitos que más destacan en cualquier visita a este museo es la sala del trono real, que se fabricó para el rey Vimaladharma en 1639.

La reminiscencia colonial de la que hablamos antes puede verse en diversos edificios tradicionales y destacados de Colombo. Uno de ellos es el viejo hospital holandés. Se trata de un complejo que se erigió a inicios del año 1600 pero que, tras la emancipación y el desuso según su concepción original fue restaurado y destinado a albergar distintos negocios destinados al ocio y el turismo: tiendas, cafés, restaurantes y varios lugares para el relax y el paseo tranquilo. Se trata del emplazamiento ideal, si quieres tomar una bebida fresca o realizar compras de recuerdos y souvenirs.

Otro edificio holandés muy importante en Colombo es la Iglesia Wolvendaal, considerada la construcción neerlandesa más importante de Sri Lanka. Además de su increíble y hermosa arquitectura y el reto de ingeniería que supuso en su momento su construcción – en plena naturaleza salvaje a las afueras de la ciudad – destaca por la variedad, riqueza y belleza de los muebles que decoran su interior.

También puede advertirse la influencia de otra metrópoli, Portugal, en la Iglesia de St. Anthony, que también constituye un interesante punto de atracción turística. Contrasta su aspecto exterior – típicamente católico – con el ambiente interior, más propio de lugares de culto del sudeste asiático dedicado a otras deidades, con presencia de fieles realizando ofrendas a los diferentes santos.
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